Deje que todo se haga con un corazón agradecido y dejó el resentimiento nunca ser parte de tu vida.
El resentimiento es siempre una expresión de su insatisfacción con Dios por lo que tiene o no le ha dado en la vida.
No piense ni por un momento que Dios se complace con acción de gracias
habla con sus labios mientras el descontento reina en su corazón.
Dios mira el corazón y con el corazón se le puede agradar o le desagrade.
Malcontents están en todas partes y en todo.
No importa lo mucho que Dios da a los que se quejan, quejarse y quejarse.
Ni una sola vez se es que alguna vez agradecido en sus corazones para cualquier cosa.
Uno que no es agradecido por las provisiones de Dios no recibirán
ninguna disposición de Dios e incluso que lo que tiene le será quitado.